Mi amigo Sergio, y lo hago vuestro también por ser un amigo del blog, me comentaba el placer que supone estar desnudo en plena naturaleza.
En la playa es más normal, estar casi desnudo o desnudo totalmente, pero lo que no es tan normal es estar desnudo en el campo, la sierra o la montaña. Lástima, no hay comunión mayor con la naturaleza.
Creo recordar que en otra entrada he tratado este tema, pero creo que se merece todas las que hagan falta. No sé cuantos de vosotros habéis podido experimentar este placer, pero seguro que no tantos como pensamos. Yo reconozco que no, tan sólo en la playa, ya que ni siquiera he podido hacerlo de forma casual con algún grupo de amigos, como me cuenta Sergio, que en un momento dado, por el calor o por relajarse en alguna ribera terminan todos en pelotas, momento que se aprovecha para entre "bromas" y disimulando mucho, en el caso de ser heteros, "experimentar" entre iguales o hablar de temas que en otro momento sería imposible.
Creo recordar que en otra entrada he tratado este tema, pero creo que se merece todas las que hagan falta. No sé cuantos de vosotros habéis podido experimentar este placer, pero seguro que no tantos como pensamos. Yo reconozco que no, tan sólo en la playa, ya que ni siquiera he podido hacerlo de forma casual con algún grupo de amigos, como me cuenta Sergio, que en un momento dado, por el calor o por relajarse en alguna ribera terminan todos en pelotas, momento que se aprovecha para entre "bromas" y disimulando mucho, en el caso de ser heteros, "experimentar" entre iguales o hablar de temas que en otro momento sería imposible.
Envidio a estos de las fotos. Me parece estar pasando un día perfecto de campo, y lo mejor de todo, un perfecto día entre amigos. La desnudez nos iguala, nos despoja de todo complejo y prejuicios. Es la libertad total.
Por todo esto os propongo algo para los próximos fines de semana. Equipémonos adecuadamente para la salida campestre.
Dejemos de lado la ropa.
Sintamos el contacto de la naturaleza en todo los poros de nuestra piel.
Y disfrutemos de la libertad ...
... sólos en la inmensida ...
... o en buena compañía.
¿Os imagináis un día como estos de todos nosotros?
Por todo esto os propongo algo para los próximos fines de semana. Equipémonos adecuadamente para la salida campestre.
Dejemos de lado la ropa.
Sintamos el contacto de la naturaleza en todo los poros de nuestra piel.
Y disfrutemos de la libertad ...
... sólos en la inmensida ...
... o en buena compañía.
¿Os imagináis un día como estos de todos nosotros?
5 comentarios:
(30) al igual que tu solo he vivido esto en la playa con mi pareja. la sensacion es fabulosa. igual que la de bañarse en el mar desnudo. nunca hemos podido hacerlo en el campo. desgraciadamente es mas complicado encontrar un sitio "desierto". me encantaria hacerlo. en grupo ni me lo planteo pero con mi pareja si. cuando he hecho nudismo la sensacion es de relajacion y tranquilidad absoluta. una envidia no poder practicarlo mas a menudo.
Practicar el nudismo en el campo o en la sierra, rodeado de auténtica naturaleza, nos transmite una pizca de protección que no ofrece la playa y que permite a los cinco sentidos disfrutar la plenitud como en nimgún otro lugar.
por favor podrías hacer una entrada de vestuarios super larga me encanta tu blog es una pasada
(MD) Dile a tu amigo Sergio, que nos podría decir dond va de picnic....
Comparto la opinión contigo Leonardo, debe ser algo increíble, y sobretodo si lo puedes compartir con tus amigos. En la foto esa que hay como una barbacoa, y todos los amigos están absolutamente desnudos hablando tranquilamente, es algo que todos tendríamos que hacer muy a menudo.
Nunca lo he probado, pero viendo estas fotos, la respuesta está muy clara... Aunque, habría un "problema". Con un ambiente tan distendido y bueno, con esa confianza, erecciones no faltarían... Si ya es placentero ir desnudo por casa, imaginaros en el campo, alrededor de tus grandes amigos y de buen rollo, algo que no se puede explicar si no se vive...
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