TODOS JUNTOS Y CON LOS PANTALONES BAJADOS

Ya llevamos casi un año juntos. Ya nos vamos conociendo. Ya tenemos confianza. Me gustaría, todos juntos, una bajada de pantalones. Creo que al igual que en las parejas la confianza es total cuando no nos importa compartir el baño, hagamos lo que hagamos. Entre amigos ocurre casi lo mismo. La confianza y la amistad llega a su máximo cuando nos hemos bajado juntos los pantalones, cuando hemos compartido desnudez sin buscar necesariamente el sexo. Creo que por eso se hacen esas amistades que parecen de toda la vida en los vestuarios de los gimnasios o trabajo.

Es por esto por lo que quiero imaginar por un momento que todos a la vez nos bajamos los pantalones para afianzar nuestra amistad.

Imagino a muchos así, jóvenes alegres y con esos buenos huevos colgones.

Otros, chicos duros, creo que sólo en apariencia, de huevos apretados y jugosas pollas.

También los habrá algo vergonzosos que nos enseñarán el contenido de sus calzoncillos como el que enseña un tesoro.

Algún madurito se bajará lentamente los pantalones y los calzoncillos para hacer más delicioso el resultado final.

Otros ni lo dudarán, no tiene nada de que avergonzarse, más bien de que presumir.

Y otros, como sería mi caso, al bajarlos ya la tendrían dura y lista para lo que hiciese falta.

Muchos nos dirían que mejor nos mandaban una foto, Curiosamente casi todos la harían en el baño o en el vestuario de su gimnasio.

En muchos casos descubriríamos que algunos gustan de cuidar su ropa interior buscando la que mejor realza sus encantos.

Y a más de uno le diríamos: no te subas los pantalones, descansa, quedate así un rato, déjanos disfrutar