Me gustan estos paquetes maduros, tan clásicos pero tan buenos, enfundados flojos en un calzoncillo blanco. Este maduro lo sabe y nos lo muestra. tiene todas las pintas de hacerlo a escondidas cuando nadie lo ve en su casa. Podría ser el del compañero buenorro que todos tenemos o el de ese amigo o vecino que siempre nos lo imaginamos en calzoncillo pero que nunca hemos tenido la oportunidar de poder ver.
ME ENCANTAS, GUAPO
ResponderEliminarYo tengo unos calzoncillos como esos, el clazoncillo blanco clásico de Calvin Klin. Cómodo y morboso al tacto. Lo malo es que tiene tantos años que se le han ido los elástico y ya no me los puedo poner porque se me caen y resulta muy incómodo, pero no puedo negar que de vez en cuando me los coloco en una paja de esas algo alternativas, me siguen poniendo cachondo como el primer día.
ResponderEliminarbuen paquete maduro en su punto.pero el conjunto me va mas anchíto.
ResponderEliminarPues a mí me han entrado ganas de restregarle toda la nuca.
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