SÍ, SOMOS MADUROS

En la entrada anterior le preguntaba algo muy concreto a los maduros y casados que nos leen, que nos ven y que disfrutan buenos ratos entrando en el blog. Sí, sí, te preguntaba a ti, al que está ahora mismo con un ojo en la pantalla y el otro atento para que no lo pillen, y a ti, al que disimula sentado con su mujer haciendo como que mira los correos en el móvil  cuando realmente se está calentando de lo lindo con el blog.

Será timidez o será que les da miedo  reconocer que son uno de nosotros. No pasa nada por dejar un comentario, os sentiréis mejor y los demás nos sentiremos más acompañados. 

Para animaros un poco a participar en esta aventura sólo se me ocurre dedicaros, mejor dicho, dedicarnos una entrada. Una entrada donde nos veamos reflejados, una entrada de maduros con experiencia, de maduros como nosotros. No tendremos cuerpos atléticos, no tendremos veinte años, pero los hemos tenido y nos gusta más los "cuarentaitantos" o los "cincuentaitantos" que tenemos. Tuvimos un paquete con una deliciosa polla y unos huevos apretados de veinte años, pero el paquete que tenemos ahora con nuestra polla gorda y nuestros huevos pesados y colgones no los cambiamos por nada.

Mirad estos cuerpos maduros, tienen un morbo encantador, tienen algo que a mi especialmente me atrae y lo que más me gusta es ver esos paquetes pesados, enfundados en unos clásicos calzoncillos blancos, perfectos, diría yo.

Y no digamos ya si lo vemos con un bóxer de tela. pensar que todo va suelto y a su aire dentro de tan sublime calzoncillo me pone malo, pero malo de cintura para abajo.



Hablando de morbo maduro no olvidemos como se multiplica si la elección de la ropa interior es un poco atrevida, como un suspensorio ...



... o un atrevido tanga. ¿Por qué no vamos a usar suspensorios o tangas? ¿Qué importan unos quilos de más? El morbo es el morbo y la provocación no tiene edad.





Llegados a este punto yo les pediría que se los quitaran, que nos enseñaran ese interior que tanto nos gusta y más los de estas edades.

Mirad este. ¿Para qué más polla si es la necesaria para esos huevos negros?



Me gusta, y seguro que a vosotros también, este capullo bien pelado a pesar de todo ese vello canoso, ya sabéis que no soy mucho de lucir el vello, pero reconozco que en este tiene un morbo especial.



Como especial es ver salir esa polla de toda esa oscuridad del vello púbico.







Con vello o sin vello los paquetes maduros tienen algo que me atraen sin remedio. Lo primero que se me viene a la mente es tenerlos en mi mano, sentir su peso y su calor.





Aunque no tengan esas pollas de veinte años, pidiendo guerra continuamente, ellos ya las guerras las han librado y en muchos casos ganado















Viendo ejemplares así me estoy calentando demasiado, un poco de agua fría no me va ha venir mal.







De lo contrario voy a terminar empalmado como estos. Aunque no tiene nada de malo. Estaréis conmigo que un madurito empalmado tiene doble de morbo que un joven, por aquello de que en un joven parece algo mas normal que en un maduro, y hay que recordar algunas veces que a los maduros también se nos pone dura, y que nos pajeamos y follamos como cualquier joven.































Espero que todos esos maduro, solteros y, especialmente, los casados, se sientan identificados con esta entrada y se animen a compartir con nosotros sus pensamientos y a participar más activamente en nuestro blog.